La constitución de una sociedad jurídica constituida por más de un accionista, supone un gran activo para una empresa al confluir dos visiones diferenciadas que complementándose pueden maximizar el rendimiento y resultados de una compañía.
Sin embargo, es frecuente que en día a día societario, haya que tomar distintas decisiones en las que puede haber discrepancias entre accionistas.
En estos casos, puede ser recomendable la intervención de un perito económico independiente , que evalúe económicamente las distintas alternativas y determine las opciones más beneficiosas para el interés común. De este modo, el perito económico adoptaría un papel de mediador empresarial o árbitro, que puede ayudar a dinamizar determinadas situaciones de bloqueo, evitando generar un perjuicio societario por la falta de entendimiento.
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